Muchos en este día olvidaron hacer alguna tarea, dar un recado, comprar algo que seguramente le hará falta o cualquier otra cosa, eso es por tener una mente frágil, o por estar enfocados en cosas que pueden ser más importantes. Pero olvidarse de cosas pequeñas no es tan importante como olvidarnos de nuestro Creador.
(Para que cada uno pueda olvidar algo quiere decir que de ante mano ya conocía o sabia de aquello que olvido.)
Porque lo que de Dios es invisible, o sea su poder eterno y todo aquello que lo hace ser Dios, se ha hecho claramente visible desde la creación del mundo. El ser humano ha podido entender todo eso con facilidad al observar la creación de Dios. Así que la humanidad no tiene excusa alguna para hacer todo el mal que hace. Romanos 1:20
Dios se hace claramente visible para cada humano por todo lo creado a nuestro al rededor, y nadie tiene una excusa valedera.
Entonces teniendo en cuenta que no podemos hacernos los que no conocemos, poner la excusa de no sabia, o cualquier cosa, hablemos del recordatorio.
Eclesiastes un libro de la Biblia lleno de tanta sabiduría en el capitulo doce nos da una de las recomendaciones más importantes, que tiene que ver con como organizamos nuestro tiempo, y de nuestra edad; nos dice:
Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud, antes que lleguen los malos tiempos, y te aflija la vejez. Así no tendrás que decir: Desperdicié mi vida. Eclesiastes 12:1.
Ten memoria de Aquel que formo tu ser desde cero. ¿Sabes? esta palabra crear viene de una palabra hebrea que solo puede referirse a Dios dado que significa crear de la nada, no la transformación de materia, la palabra es (bara') y el verbo (ex nihilo) es la misma palabra que se usa para referirse a la creación de los cielos y la tierra.
La Pregunta es ¿Por qué la Biblia nos dice que no nos olvidemos de Dios?
Tal vez por la vanidad, por trabajo, ocupaciones de la casa, un deporte, un vicio, cualquiera puede ser la razón a la que le demos mayor atención antes que a Dios,
El porque en la juventud esta muy claro, es cuando tus fuerzas están en su punto más alto, hay vitalidad, ánimo, muchas ideas explosivas para hacer grandes obras para Dios, tu salud no debería ser un problema, lo lastimoso sería llegar a una edad adulta, mirar atrás y no tener nada para poder presentárselo a Dios.
Hoy tu puedes dar tú tiempo, no le des a Dios tus sobras, dale lo mejor, búscalo a primera hora de la mañana en tu devocional comparte con las personas que te rodean, de modo que cuando lleguemos al a vejez no digamos: he desperdiciado mi vida.
Aprovechar la juventud es para todos los que tuvimos la oportunidad de conocerlo desde muy pequeños, aunque nadie tiene excusa delante de Dios para presentar buenas obras.
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de ante mano para que anduviésemos en ellas. Efesios 2:10
Señor en la Plenitud de mi fuerza,
fuerte para ti seré
Y eb cada dulce delicia,
A Ti mi canto entonaré.
Al mundo mi corazón no daré
Si quiero profesar tu amor,
Ni a que la fuerza me abandone Esperaré
S quiero esforzarme en tu labor.
Los mandatos de esta tierra
No haré con celo presto,
Subiendo luego la celeste cima
Con paso cansado y lento.
Oh, no será para ti mi débil deseo,
Ni mi parte pobre y baja.
No te daré el vacilante fuego
ni el ascua que se apaga.
Toma mis años brillantes,
Y los gozos entrañables.
Para ti la flor de mi vida.
La plenitud de mi corazón.
Thomas H. Gill.
Tal vez tu tienes todo el ánimo de servir a Dios, y aún no sabes como hacerlo porque realmente no lo conoces, pues te hago una vez más la invitación como en anteriores días para que de una manera sincera puedas creer en Cristo como tu único y suficiente Salvador, has una oración reconociendo tu pecado, que te arrepientes del mismo, y consiente de que lo único que te puede librar del castigo eterno para pasar la eternidad en la presencia de Dios es la obra magnifica de Cristo en la Cruz por ti.
Si este devocional a podido ser de bendición para tu vida como lo ha sido para mi, compártelo, en tus redes sociales para que más personas puedan dar a Dios la flor de su vida.
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